Poco se habla en la actualidad del mito de D.Juan Tenorio por la fiesta de Todos los Santos. Tal vez alguna representación teatral o de alguna de las muchas óperas inspiradas en la imagen del burlador de Sevilla.
Ahora se impone la costumbre anglosajona del disfraz a base de calabazas recortadas y máscaras de pseudoterror.
De origen celta hace 2500 años, cuando el final del año celta coincidía con nuestro 31 de Octubre, fué exportada a Estados Unidos por emigrantes europeos en el siglo XIX. Ha adquirido relevancia debido a las películas americanas sobre el tema y hoy día se celebra prácticamente en todo el mundo.
Pero yo me quedo con la tradición tan nuestra y tan agradable como es comer castañas, boniatos y panellets.