Otro del sinfín de apuntes hechos en este río ya que es el que me resulta más cercano. Cuando llego y veo la belleza de algunos rincones, lo primero es echar mano del pequeño equipo que siempre llevo a cuestas. Luego viene la decepción, al ver que es imposible igualar a la naturaleza.
Mi otra arma inseparable es la máquina de fotos (también minúscula) para no perder detalle en ningún momento. Así saqué las fotos de libélulas. Esta azul el mismo día que la anterior. Fué para mi toda una proeza. ¡Que insectos más rápidos!. Aunque tengo otro blog para fotos: "Corteza de abedul", la incluyo en éste, porque me hace ilusión haber captado, con más o menos definición, esta preciosidad de animal.