Debe su nombre a la reina Mª Luisa, esposa de Carlos IV de España, cuando en el siglo XVIII fué obsequiada con dicha planta, recién importada de América del Sur.
La María Luisa, hierba Luisa, cidrón... etc., diversos nombres con la que se conoce, es una verbenácea de refrescante olor a limón. Florece en estos momentos, a principios de verano, dando unas insignificantes pero frangantes florecillas de un violeta claro, dispuestas en forma de espiga.
Tiene numerosas aplicaciones en cosmética debido a su riqueza en aceites esenciales como el citral y el lemoneno, pero sobre todo es conocida por sus propiedades medicinales, tomada en infusión como digestivo y carminativo. También se está utilizando últimamente en Cuba en tratamientos epilépticos por ser de acción espasmolítica.
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