realizar alguna actividad con tranquilidad.
La magnífica terraza que pudimos disfrutar gracias a las atenciones del personal y la dirección del Hotel, nos permitió realizar dibujos y acuarelas a placer . Las vistas a la playa y sobre todo al Castillo hacen que todas las horas del día tengan un encanto diferente. Cada momento una luz especial. No hay posibilidad de aburrimiento o indiferencia.
Es justo además, resaltar el excelente servicio que se nos ha ofrecido.
¡Así no hay excusa para no tabajar!
Cuando hay un contraluz hay que usar el flash.
ResponderEliminarA ver cuando vienes a desayunar